sábado, 12 de julio de 2008

Busco a las amigas de la niñez





Entre los novios, los empleos y los olvidos, se nos ha ido el tiempo y ese espacio, como decirles, ese espacio encantador que sólo es posible con las amigas de infancia, cuando los príncipes pueden ser azules, verdes o amarillos, porque todavía no hemos aprendido bien el cuento y tenemos la oportunidad de reconstruirlo, de inventarlo o de olvidarlo por completo.

Quisiera recuperarlas y olvidar que este tiempo ha pasado sin ellas. Sólo juntarnos en una casa que ya no existe, una casa de madera protegida por un árbol de cerezas agrias, donde muchas veces fui feliz. Quiero esperarlas y verlas llegar, cada una como era. Ver a mi comadre de muñecas con su aire de Diosa cruzar la única calle mágica de este país, la calle Mella de un pueblecito que queda donde el mundo empieza y no termina nunca, y ver a una flaca bellísima con los libros bajo el brazo ¿seguirá cargando los libros a todas partes?

¿Cómo será el encuentro? Tal vez nos reconoceremos a pesar de todo, tal vez no hemos cambiado tanto. Iremos sin maquillaje, amantes, novios, esposos o soledades. No hablaremos sobre el trabajo, los despidos o los ascensos. No guardaremos las poses sobre felicidad y decencia de mujeres que ya deben ser damas. No, sólo iremos para encontrarnos tal como éramos, tal como somos o tal como nunca volveremos a ser.

P.D. El tiempo me ha regalado amigas encantadoras, pero hay un mundo que sólo existe con las de la niñez.

Canta Ana Belén, pero ¿quién es el compositor o la compositora?

1 comentario:

María Scharbay Martínez dijo...

Esa canción me encanta. Sin embargo ahora vivo mas las amistades buenas y honestas que tengo al lado que las de mi niñez, esto tiene que ver que las amistades eran varones. Eso creo.